Tres focos siguen activos en la Patagonia en los parques nacionales Lanín y Nahuel Huapi, más un tercero en Trevelin, Chubut. El Bolsón ya tiene calma y llegaron aviones y helicópteros a Nahuel Huapi. Fuente: Página/12.
Pese a la labor de los bomberos y brigadistas, los incendios del Parque Nacional Lanín, Neuquén, y del Nahuel Huapi, en Río Negro, avanzan sin control.
En el Bolsón los focos se encuentran en enfriamiento, pero el trabajo continúa, a la vez que se sumó desde el domingo un incendio forestal en la localidad chubutense de Trevelin, que se propagó hacia Esquel.
El incendio se originó cerca de la Ruta Provincial N°34 en una zona conocida como «Huella de los Rifleros».
En la zona están trabajando bomberos, brigadistas del Servicio de Prevención y Lucha Contra Incendios Forestales (SPLIF) de Trevelin, Esquel, Lago Rosario y combatientes del Parque Nacional Los Alerces.
Son más de 100 personas conteniendo las llamas,equipadas con 21 camionetas, 4 autobombas, cuatro camiones cisternas, una motoniveladora, una topadora, un camión y dos aviones hidrantes provistos por el Servicio Nacional del Manejo del Fuego.
Los otros focos de Chubut en El Pedregoso -55 hectáreas- y en Epuyén -3500 hectáreas- están contenidos, aunque el de Atilio Viglione continúa, afectando a unas 5.000 hectáreas.
Lanín y las comunidades mapuches
Parque Nacional Lanín es el área más afectada en superficie: de las 46.000 hectáreas quemadas en la Patagonia, este incendio consumió más de 22.000 hectáreas.
Desde fines de enero, más de 260 brigadistas y trece medios aéreos trabajan en el combate del fuego, pero las condiciones climáticas dificultan la tarea.
Tres comunidades mapuches -Chiquilihuin, Linares y Aucapan- que viven dentro de este Parque en las cercanías a Junín de los Andes, tuvieron que combatir el fuego para que no avance hacia sus casas.
Al no contar con una rápida y eficiente ayuda del estado, lanzaron la campaña «Solidaridad en acción» para juntar alimentos y equipamiento para el combate.
«Muchos de los chicos de 18 años para arriba no conocen tanto la cordillera, pero tienen ganas de salvar lo que se está quemando, que son nuestros bosques», describió Roxana Paillalauquén, parte de la comunidad Chiquilihuin.
Según relata Roxana, 40 personas de la comunidad están en el combate y el resto los asiste y prepara comida.
«Esperamos lluvia, que en algún momento venga y apacigüe un poco este fuego. Mientras no llega, nosotros tenemos que seguir salvando y acompañando a los brigadistas que vienen».
Crisis climática
«La crisis climática exige más brigadistas e infraestructura para respuesta rápida a focos y penalizar desmontes e incendios», alertó Hernán Giardini, coordinador de la Campaña de Bosques de Greenpeace.
La Patagonia tuvo varios focos simultáneamente y no daban abasto los brigadistas ni los equipos disponibles a nivel provincial y nacional.
El coordinador general del Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (SPLIF) de Bariloche, Orlando Báez, indicó que administrar los recursos era un «juego de ajedrez».
Por eso, argumentó que todo el país debería tener aeronaves pesadas con mayor capacidad de descarga de agua y maquinarias viales, «para poder dar otro tipo de respuesta».
Los informes oficiales indican que en el Parque Nacional Nahuel Huapi se quemaron más de 11.000 hectáreas desde que comenzó el fuego a mediados de diciembre.
Las dos zonas más complicadas son El Manso y Los Manzanos, donde trabajan 121 combatientes -brigadistas, guardaparques y pobladores voluntarios- y 104 personas del área de logística: asistentes en campamentos y equipos, preparación de viandas y comida.
En El Manso, Las Nildas, un grupo de 30 mujeres voluntarias organizan la logística para que los combatientes tengan vianda, calzado y ropa adecuada para enfrentar el fuego. Desde el domingo 16 de febrero, después de reclamos vecinales, llegaron los helicópteros y aviones.
Nely Soria, una de las integrantes de Las Nildas, dijo:
– «Hubo negligencia, inoperancia de los organismos que tienen que estar al tanto de los incendios para llegar a esta situación. Por suerte están trabajando los aviones ahora;
– “Esperemos que esto concluya lo más pronto posible para que el Valle de El Manso vuelva a retomar sus actividades normales»,
Enfriamiento en El Bolsón
En el Bolsón, ya sin focos activos, desde el Estado se realizan tareas de limpieza y reordenamiento bajo tres ejes: retiro de escombros, limpieza de banquinas y recuperación de la red eléctrica.
Todavía una gran parte del pueblo no volvió a conectarse al tendido porque, en el incendio, se quemaron la gran parte de los cables.
El gobernador de Río Negro repartirá el fondo nacional de $5.000 millones entre los afectados.
«Si se cumple con el número anunciado de $30 millones por casa, es algo aceptable para construir una vivienda de 40 metros cuadrados con una habitación, cocina-comedor y baño en la cordillera», calculó Juan Fernández, integrante del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) de El Bolsón.
Sin embargo, alertó de la necesidad de brindar acompañamiento técnico y planificar los servicios para la reconstrucción.
Fuente: Página/12.
Foto: Redes sociales.