(Buenos Aires, 28 de junio de 2010). “Muebles con historia y un pasado que los enriquece, muebles jóvenes en armonía con el tiempo, belleza y placer al calor de la madera”, así se autodefine la empresa santafesina Ivopé SRL, que participó de FIMAR 2010. En ese ámbito, el jefe de Producción, Hugo Techtermann, dialogó en exclusiva con el enviado especial de D&F Muebles. En la imagen, Consola de doble curva, prototipo premiado en High Point.
– ¿La empresa cambió su composición accionaria?
– Sí, ahora la mayoría de los capitales son de origen nacional, por lo que parte de nuestra producción va al exterior y otra parte se está comercializando hace más de 2 años en el mercado local.
– Para ello debieron implementar una acción más agresiva en el mercado local.
– Sí, antes utilizábamos mucho el algarrobo, pero ahora es inaccesible porque se está prohibiendo por su extinción. Hace unos años probamos el eucaliptus grandis y nos dio buenos resultados, inclusive lo exportamos. Lo adaptamos definitivamente y creemos que es la madera del futuro porque no se va a acabar, mientras que las otras maderas tarde o temprano se terminan.
– ¿Cómo trabajan el eucaliptus?
– Lo compramos seco, pero si no esta al nivel de nuestra exigencia lo volvemos a secar.
– ¿Tienen que usar madera certificada para la exportación?
– Exactamente. No estamos usando totalmente madera certificada, pero como empresa
estamos certificados por el FSC.
– ¿Ese requerimiento fue por voluntad propia o por exigencia del mercado?
– Por ambos. En Estados Unidos recién ahora se exige el ingreso de madera certificada. En cambio en Europa son más exigentes. Con la certificación de la madera buscamos que la empresa tenga otro perfil.
– ¿Cómo llegaron del mueble oscuro al más claro y liviano que presentaron en FIMAR 2010?
– Es más liviano a la vista. En realidad, se está buscando abarcar todo el mercado con un mueble tradicional contemporáneo. Para el mercado interno tuvimos que cambiar las dimensiones de las sillas y de todos los muebles.
– ¿Tienen un equipo de diseñadores?
– Sí, tenemos un diseñador porque dos veces al año participamos en la Feria Internacional de High Point. A principio, mitad y fin de año tenemos que hacer prototipos nuevos para presentar en esa feria. El renovar es permanente para nosotros.
– ¿Cómo llegaron al producto final que presentaron en FIMAR?
– Por la exigencia del mercado que te pide cambiar.
– ¿A qué target están llegando con ese producto?
– Abarcamos un mercado de clase media-alta. La clase baja no nos interesa porque hacemos algo diferente.
– ¿Tercerizan parte de la producción?
– En este momento, no. Antes, sí. Y mucho. Nos dedicábamos a exportar, hacíamos 4 contenedores para el exterior, pero ese mercado se cayó y sólo quedamos con uno. Por ese motivo buscamos el mercado en la Argentina.
– ¿Ese contenedor que se exporta cuánto representa de la empresa?
– Un 40 por ciento de la producción.
– ¿Responden a la demanda de los locales o están trabajando con arquitectos?
– Estamos abiertos a todo. Por ejemplo, el año pasado hicimos un proyecto en Bariloche de 15 departamentos, que amoblamos completos. Lo llamamos Proyecto Contra, está ubicado en Villa Catedral, y enviamos un total de 15 mesas con sus correspondientes 6 sillas para cada departamento, pecheros para los esquíes, camas, mesas de luz.
– ¿Entre el eucalipto y el algarrobo cuál te gusta trabajar más?
– El eucalipto se compra en tablas ya dimensionadas. El algarrobo lo comprábamos por tablones para sacarle las piezas y debíamos tener piezas de todos los muebles. Ahora viene en pallet, va a un sector del galpón donde se apila y se saca de ahí. La dimensión de todo lo que se movía antes con el algarrobo era mucho mayor.
– ¿Cuántos proveedores de eucalipto tiene la empresa?
– Por ahora, sólo dos. Les compramos a Aserradero Ubajay y empezamos con la empresa Pomera Maderas, de Corrientes, que usan madera certificada.
– ¿Parte de los muebles que trajeron a FIMAR tienen los prototipos en el Salón del Diseño?
– Uno de esos prototipos ganó un premio en el último High Point de octubre del año pasado, es la consola de doble curva. Es de madera terciada, pintada a mano. En Argentina esos productos no se venden, en Estados Unidos, sí. También expusimos una mesita, que tiene la forma de un tronco cortado en forma de sándwich. Eso pegó bastante en Estados Unidos.
Fotos: D&F Muebles.
Más información en D&F Muebles impreso de junio (Año XVIII, número 119).
