Un incendio afectó a unas 220 hectáreas de eucaliptos en Corrientes

(Buenos Aires, 3 de enero de 2011). Un incendio forestal, que se extendió desde el mediodía del jueves 30 de diciembre hasta la 2:30 de la madrugada del día siguiente afectó a unas 220 hectáreas de forestaciones de eucaliptos y a alrededor de 50 hectáreas de pastizales en la zona de Mocoretá, provincia de Corrientes, informaron fuentes de la Dirección de Recursos Forestales provincial. No hubo heridos de gravedad ni animales afectados. Los daños informados por el director de Defensa Civil, Eulogio Márquez, permiten afirmar que “de la superficie afectada un 80 por ciento corresponde a forestaciones de eucaliptos y un 20% a pastizales”.

El incendio se produjo en horas del medio día del miércoles 30 en las inmediaciones de lo que se denomina “el Peaje Piedritas”, en la zona correntina de Mocoretá, y pudo ser extinguido a las 2.30 de la mañana del ultimo día de 2010. Según informaron fuentes oficiales la superficie afectada serian unas 270 hectáreas y no deben lamentarse perdidas de vidas humanas o de animales.

Trabajó para extinguir las llamas personal de la Dirección de Recursos Forestales, la Dirección de Defensa Civil y el Ministerio de Salud provinciales.

Los daños informados por el director de Defensa Civil, Eulogio Márquez, permiten afirmar que “de la superficie afectada un 80 por ciento corresponde a forestaciones de eucaliptos y un 20% a pastizales”.

Márquez afirmó que “no hay que lamentar en esta oportunidad ni pérdidas de vidas humanas, ni de viviendas. Aunque algunos de los bomberos sí han sufrido lesiones leves, como por ejemplo una de las bomberas voluntarias se lesionó un tobillo”.

El incendio comenzó en horas del mediodía y aún deben establecerse las causas. El operativo se llevó a cabo según lo establece el protocolo, estando la coordinación General a cargo del Ministro de Gobierno, Gustavo Valdés (Presidente de la Junta Provincial de Defensa Civil), la Coordinación Operativa del Director de Defensa Civil, Eulogio Márquez (Secretario de la JPDC) y el Comando de Operaciones –en el lugar- de Gustavo Zandona, presidente de Bomberos de Mocoretá.

La autorización del uso del Avión Hidrante del director de Recursos Forestales, Luis María Mestres, y el Jefe de Tiro –especialista en el tema- fue el Comandante Juan Barras (2ª Jefe del Cuartel de Paso de los Libres). El Ministerio de Salud se encargó de disponer ambulancias cercanas al siniestro y también que el sanatorio de la zona estuviera preparado a recibir posibles víctimas. La Seguridad estuvo a cargo de las Comisarías de Mocoretá y Juan Pujol.

El ataque del incendio por tierra fue llevado adelante por cuarteles y dotaciones de bomberos de la Regional 3 (tres dotaciones y autobombas de Mocoretá, una dotación de Juan Pujol, una dotación y un vehículo 4X4 de Curuzú Cuatiá, una dotación y un camión cisterna de Monte Caseros y, apresto para salir, el cuartel del Paso de los Libres).

Los funcionarios involucrados coincidieron en que el operativo puede considerarse exitoso, no sólo por los resultados logrados, sino por la manera en que se llevó a cabo el trabajo. Márquez destacó: “Fue muy importante que la comunicación estuviera muy bien aceitada entre nosotros debido a que se respeto lo previsto en el protocolo y a que contamos con un inventario detallado de los elementos disponibles en cada dotación de Bomberos de la provincia lo que sin dudas facilitó y agilizó mucho el trabajo”.

Por su parte, Luis Maria Mestres hizo referencia a la utilización de una herramienta clave para el combate de incendios como es el avión hidrante que se utilizó en este caso, apostado en Paso de los Libres y que es uno de los cuatro dispuestos por el Plan Nacional de Manejo del Fuego para proteger esta Región con este fin.

Mestres sostuvo: “La rapidez para actuar en estos casos depende de contar con protocolos claramente establecidos sobre los procedimientos a seguir, con la información previa de la zona y de la proximidad a la que se hallen los elementos necesarios para el combate de incendios (pista, agua, cuarteles de bomberos etc.), condiciones fundamentales que ciertamente se dieron en este caso ya que se pudo operar con una de las pistas que tenemos georreferenciadas y que está ubicada en la Estancia el Pilincho, a escasos 7 minutos del foco del incendio”.

Mestres se explayó sobre el tema del manejo del fuego en general expresando que: “Es necesario insistir en el hecho de que, aunque estemos técnicamente preparados, trabajemos articuladamente, respetemos todos los protocolos establecidos por los distintos organismos que componemos la Junta Provincial de Defensa Civil y que, como en este caso logremos controlar y extinguir el fuego con el menor daño posible. No debemos dejar de tener en cuenta que estamos en una época del año crítica con respecto al tema uso cultural del fuego. Hay que decir que a las habituales causales antrópicas se agregan condiciones naturales propicias -seca, calor, etc.- que incrementan el riesgo de propagación de incendios durante el verano”.

Lo expresado por este funcionario está contemplado en los alcances de la Ley Nº 5590, que establece la responsabilidad de la Dirección de Recursos Forestales en la prevención y el control de los incendios rurales y de la fiscalización del empleo del fuego en áreas rurales, lo cual implica que el uso del fuego en terrenos rurales requiere un pedido de autorización ante este organismo.

Como síntesis Mestres expresó:“Sin dudas en el manejo racional del uso del fuego la clave está en la prevención. Sin embargo, en el combate de incendios la clave radica en trabajar articuladamente respetando los procedimientos establecidos en los protocolos acordados entre los organismos participante”.

Foto: Archivo Desarrollo Forestal (Gentileza Jorge Pujato).

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