Veta Noble certificación exportación: D&F Muebles visitó el stand del programa chaqueño Veta Noble en Mendoza, durante el VIII Congreso Forestal Latinoamericano y el V Congreso Forestal Argentino, realizados del 27 al 29 de marzo. Luego consultó telefónicamente a sus referentes para conocer detalles, Gonzalo Romero -diseñador Industrial a cargo del Área Diseño- y Sebastián Alperín, a cargo del Área de Producción. El caso de una PyME de Chaco.
– El objetivo de la entrevista es conocer la actualidad del proyecto Veta Noble.
Sebastián Alperín- Veta Noble brinda, básicamente, asistencia técnica y financiera al carpintero. El objetivo es que el carpintero pase de un proceso productivo tradicional a un proceso productivo de escala, con todo lo que eso demanda. Porque la transformación que el programa busca es de tipo cultural respecto de la forma de trabajo. Y también del uso racional de la madera. Nosotros trabajamos a partir de tableros finger (joint, en adelante “FJj”), que permite optimizar tiempo y calidad en la producción de muebles. Y, sobre todo, el uso racional de la madera.
En muchos casos el carpintero desconocía los tableros finger. Es una cuestión cultural. De la otra forma tenía otros costos y mucho desperdicio de madera. Con el uso de tableros FJ logramos mayor capacidad de producción de los carpinteros. Y tenemos casos testigos de carpinteros que han dejado de ser carpinteros tradicionales y han pasado a ser industriales. A ellos cada vez les cuesta más conseguir el rollo de madera. El programa se enfoca en esa transformación y en el agregado de valor para el mueble chaqueño. Con el tiempo Veta Noble se transformó en una marca más amplia: estamos trabajando con artesanos, con industriales del hierro, estamos incorporando nuevas maderas. Eso requiere que los carpinteros incorporen maquinaria acorde. Eso es lo que Veta Noble trabaja como política de Estado.
– ¿Veta Noble se autofinancia o depende del presupuesto del estado provincial chaqueño?
SA- Veta Noble es autosustentable por las ventas que se generan y, a su vez, con ese dinero podemos pagarles a los carpinteros que ofrecen sus productos. El objetivo no es comercial. Con los canales de venta se busca que el carpintero pueda acceder a mercados a los que de otra manera no llegarían. Se busca que las ventas sean rentables para los carpinteros.
Gonzalo Romero- El programa trata de transferir esos conocimientos a los diseñadores y a los productores. El objetivo de ellos es que el producto sea comercial. Y nosotros tratamos de hacerles ver que hay que trabajar sobre diseño y logística, haciéndoles ver que deben lograr que los productos sean más transportables, más modulables. Se busca que ellos puedan lograr, en un futuro, no depender de Veta Noble y ser autosuficientes con sus proyectos.
– ¿Qué requisitos tiene que cumplir un carpintero o una fábrica para participar del programa?
SA- Primero, que la empresa esté declarada, que tenga personal en blanco; que tenga capacidad edilicia y un layout en fábrica adecuado para trabajar tableros finger. Y lo más importante es que tenga ganas de poder transformarse y adoptar los nuevos paradigmas del mercado.
GR- No todos los emprendedores están inscriptos y les damos el soporte para iniciar la inscripción a un monotributo.
– Desde el diseño, ¿qué es lo que más les cuesta a carpinteros o empresas para hacer el clic y transformarse?
GR- Por ahí lo que más cuesta es que tenga un adecuado layout en fábrica. Hay muchos que no tienen espacio, lugar de trabajo; a otros les falta maquinaria.
Veta Noble certificación exportación: Locales comerciales
– ¿Cuáles son los locales comerciales y qué volúmenes estimados de ventas tienen?
SA- Las sucursales están en Corrientes capital, las de Chaco están en Resistencia -en el shopping-, Sáenz Peña y Machagai, y la de avenida Belgrano en Capital Federal. Nosotros analizamos las ventas por año y notamos que se mantienen fuertes los meses de febrero, marzo y abril, luego caen y vuelven a reputar en junio y julio. Pero hay buenos niveles de ventas, que nos permite ser autosustentables.
– ¿Han evaluado tener revendedores y solamente se manejan con esos cinco locales de venta?
SA- Tenemos los cinco puntos de venta y no tenemos revendedores. Dejamos en libertad a cada carpintero de que pueda hacer nexos con cualquier revendedor de muebles. Nuestro mayor logro es que ellos puedan comercializar con otras mueblerías.
GR- Nosotros no nos apropiamos de las marcas de quienes participan en el programa. Siempre que participamos en ferias invitamos a los emprendedores para que ellos hagan sus conexiones directas. Porque la idea es que ellos puedan crecer.
– ¿Cuántas son las empresas que aportan y producen para que después se comercialicen los muebles con la marca Veta Noble?
SA- Nosotros contabilizamos 36 carpinteros y fábricas de muebles que participan, que se suman a los emprendedores que trabajan en hierro y en decoración. Ahí hay otros 40 más.
GR- Con esa iniciativa la idea es completar la cadena de valor. Sobre todo, porque estamos trabajando en la marca Origen Chaco. Y tenemos artesanos que trabajan con materias primas locales, nuestra madera es local, el cuero es local, al igual que la mano de obra. Entonces, la cadena de valor implica trabajar de manera global con cerámica, cerámica y cuero, hierro y madera. En reciclado estamos trabajando con algunos descartes de madera de Chaco. Y también algunos muebles están tapizados con tela de jean, que se fabrica también en la zona. Estamos lanzando una línea de lámparas hechas con algodón de la zona.
Certificación y control de calidad
– Se está impulsando la certificación y el hecho de poner el foco en sustentabilidad. ¿Tienen en mente a mediano plazo algún objetivo de ese tipo?
GR- Sí, tenemos proyectos. Justamente, vinimos con esa perspectiva del Congreso Forestal de Mendoza. Incluso, queremos hacer controles de calidad para los muebles. Queremos tener algún control sobre los materiales que utilizamos, también sobre los diseños que hacemos, para tener certificación de origen y de calidad del mueble.
– ¿Qué consultas recibieron en el stand del Congreso?
GR- Tuvimos muchas consultas respecto de si hacíamos envíos al exterior. También preguntaban qué tipo de madera era, el precio, el origen. Preguntaban también por el programa Veta Noble, porque no es muy conocido en todo el país y creo que no existe en Argentina un programa que se haya mantenido en el tiempo y que haya cobijado a tantos diseñadores y productores de la zona. En algunos casos ya no participan del programa y pudieron abrir su camino y hacer su marca propia.
– ¿Qué les respondieron a quienes les preguntaron si exportaron?
SA- Nosotros estamos en un camino de transformación hacia el mercado exportador. Pero antes de enfocarnos de lleno en eso queremos trabajar en todas las cuestiones de certificación para poder tener un producto de calidad. Estamos en ese proceso y es un objetivo que tenemos. Pero, por ejemplo, queremos trabajar en el diseño para tener muebles desarmables que permitan un traslado más fácil.
GR- Tenemos que estar preparado para la exportación en todos los aspectos, tanto en diseño como en certificación. Si un producto es exportable también va a ser más fácil venderlo en el país, porque facilitaría mucho en el aspecto logístico.
– Haciendo la conversión a dólares, ¿cómo están en cuanto a precios los productos que se exhibieron en Mendoza?
SA- A los extranjeros les parecieron precios razonables en dólares. Para la economía local son precios costosos porque apuntan a un perfil de consumidor medio-alto. Lo que pasa es que el recurso (por la madera) es caro. El 60 por ciento del costo del producto es la materia prima.
– También sirve para revalorizar el recurso maderero de la provincia.
SA- Exacto.
– ¿Tienen registrado el número de diseñadores y productores que han pasado por el programa y ahora trabajan por su cuenta?
SA- Entre los que han participado y los que lo siguen haciendo, son alrededor de 200. Es un programa que ha tenido buenos resultados, por eso estamos muy contentos con el trabajo que se viene haciendo. Y poder ver que emprendedores o carpinteros hoy tienen su propia marca para nosotros es muy importante. Eso es a lo que apuntamos.
– Los quería consultar respecto de la provisión de madera. Sé que el Centro Tecnológico de la Madera (CEDETEMA), ubicado en la localidad de Machagai, produce tableros alistonados de algarrobo. ¿Hay en Chaco provisión constante de este insumo para los carpinteros?
SA- Sí, en la provincia hay fábrica de tableros. Nosotros trabajamos con empresas de Castelli; en su momento había proveedores de Villa Ángela, de Sáenz Peña. Hay industriales que pertenecen al programa y se autoabastecen de sus propios tableros. Es decir, lograron armar sus propias fábricas de tableros. Ahora el CEDETEMA tiene su propia fábrica de tableros y nos ayuda muchísimo en ese aspecto, porque ellos intervienen en ese mercado. Y eso les permite a los carpinteros tener la posibilidad de comprar tableros a diferentes productores.
GR- Y al intervenir CEDETEMA tenemos la tranquilidad de que la madera sigue un ciclo cuidado, porque se trabaja en coordinación con la Dirección de Bosques. CEDETEMA trabaja con maderas que utilizan guías y eso permite certificar, en algún punto, que la madera tiene un origen cuidado. Podemos trabajar con un mueble que a futuro tenga una certificación de madera sostenible.
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Fotos: D&F Muebles (Enviados especiales al VIII CONFLAT y V Congreso Forestal Argentino a Mendoza capital) y gentileza Genzio Muebles.