Ventas muebles aumentaron 25%: Bazar, decoración, textiles del hogar y muebles registraron un aumento interanual de ventas minoristas del 25% en marzo de 2022. Así surge del Índice de Ventas Minoristas PyMEs de CAME,elaborado en base a su relevamiento mensual entre 775 comercios del país, realizado entre el 30 de marzo y el 1º de abril. La producción industrial de la industria manufacturera PyME de maderas y muebles cayó 11,4% anual en febrero.
D&F Muebles difunde los últimos datos disponibles relevados por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
– Las ventas minoristas PyMEs aumentaron 15% anual en marzo, en la medición a precios constates y acumulan así un alza de 20,4% en el primer trimestre del año. Frente a febrero, subieron 12,8%.
– El inicio de las clases presenciales en todos los niveles educativos impulsó las ventas de indumentaria y calzados, especialmente si se lo compara contra 2021, cuando todavía prevalecía la modalidad de clases virtual.
De todos modos, fue un mes difícil para el empresario PyME, que se vio muy afectado por las subas de precios de reposición de la mercadería, demoras en las entregas y faltantes de productos.
Así surge del Índice de Ventas Minoristas Pymes de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME),elaborado en base a su relevamiento mensual entre 775 comercios del país, realizado entre el 30 de marzo y el 1 de abril.
El 50,5% de los comercios relevados comentaron que sus ventas del mes fueron entre buenas y muy buenas (vs 56,5% el mes anterior), mientras que el 36,7% calificó como buenas o muy buenas las utilidades obtenidas.
Análisis por rubro
Los mayores aumentos interanuales ocurrieron en Calzado y marroquinería (+29,8%), Bazar, decoración, textiles del hogar y muebles (+25%) y el rubro Indumentaria, lencería y textil(+22,8%).
– Alimentos y bebidas:las ventas en marzo subieron 9,9% anual y acumulan un aumento de 23% para el primer trimestre del año frente al mismo periodo del año pasado.
Marzo fue un mes muy difícil para los comercios de ese rubro por las subas acentuadas de precios. Los comercios recibieron aumentos en cada entrega de proveedores, especialmente en harinas, panificados y lácteos.
Hubo algunos cambios en los patrones de consumo, como menos ventas de productos caros y compras más controladas. En la comparación mensual, las ventas se retrajeron 5,8% (siempre medidas a precios constantes).
Cuando se compara contra marzo de 2020, mes de pleno ingreso a la cuarentena, las ventas de Alimentos y bebidas subieron 17,1% (a precios constantes).
– Bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles:las ventas en marzo subieron 25% anual y 20,4% mensual, a precios constantes.
Para el primer trimestre del año acumulan un incremento de 25% (frente a iguales meses de 2021). Las ventas comenzaron el mes con firmeza, pero sobre la segunda quincena se frenaron.
Las subas de precios y las demoras de las entregas de los proveedores redujeron la oferta de esos productos. Los comercios comentaron que hubo mucha especulación por parte de los proveedores, que incumplieron las entregas pautadas.
Cuando se compara contra marzo de 2020, las ventas de esos productos subieron 42,4% (a precios constantes).
– Indumentaria, lencería y accesorios:las ventas subieron 22,8% anual en marzo y 26,6% mensual. La suba fuerte en este rubro estuvo muy influenciada por el inicio en el ciclo lectivo.
Para el primer trimestre del año acumulan un incremento de 22,6% (frente a iguales meses de 2021). A pesar de esa variación positiva, el sector arranca abril con mucha incertidumbre por las importantes subas de precios que se vaticina en esos productos.
Algunos comercios comentaron que los proveedores ya les avisaron que la ropa llega con aumentos de hasta 25% para el mes.
Comparando marzo de 2022 frente a marzo de 2020, las ventas de ese rubro subieron 48,7% (a precios constantes).
– Calzado y marroquinería:en marzo se vendió 29,8% más que en el mismo mes del año pasado y 43,8% por encima que en febrero (medidas a precios constantes).
Para el primer trimestre del año acumulan un incremento de 30,8% (frente a igual periodo de 2021). Lo que más salió, fue el calzado escolar. Si bien mucho se vendió en febrero, marzo completó la demanda, especialmente por las faltas de stock que hubo en muchas variedades de productos en el mes anterior.
Sobre los últimos diez días del mes, los comercios manifestaron que los proveedores comenzaron a retacear las entregas, especialmente los calzados de cuero, donde ese insumo quedó con el precio retrasado y se especulaba con un reacomodamiento fuerte.
Frente a marzo de 2020, las ventas de esos productos subieron 59,5% (a precios constantes).
– Ferretería, materiales eléctricos y materiales de la construcción:las ventas crecieron 14,1% anual a precios constantes en marzo y 12,8% en la comparación mensual (vs febrero 2022).
Para el primer trimestre del año acumulan un incremento de 18,4% (frente a iguales meses de 2021). “Se vendió bien, pero la situación fue complicada”, fue la frase repetida por los comercios consultados.
Hubo compras anticipadas para congelar precios, que incidieron en el buen resultado del mes.
Frente a marzo de 2020, las ventas de esos productos subieron 26,2% (a precios constantes).
Ficha técnica
– Fecha de relevamiento: del 30 de marzo al 1 de abril de 2022.
– Unidad de relevamiento: comercios PyME que desarrollan su actividad dentro del país y venden productos vinculados a los rubros seleccionados
– Cobertura: nacional
– Muestreo: panel no probabilístico.
– Forma de recolección de la información: encuesta digital vía formulario virtual. Los encuestadores los envían a las empresas de su zona y/o se contactan con ellos ya sea por WhatsApp, teléfono o vía presencial.
– Muestra: 775 comercios de 6 grandes rubros en las ciudades capitales y/o principales del país.
– Deflactor 2021: inflación al mes de febrero 2021 informada por INDEC, desagregada por rubros.
Producción PyME en febrero: caída del 11,4% anual en madera y muebles
– La actividad de la industria manufacturera PyME cayó 6,3% anual en febrero (medida a precios constantes) y acumula una baja de 7,97% en el primer bimestre del año (frente a iguales meses de 2021).
– Frente a enero tuvo un aumento de 3,6% sin desestacionalizar.
– El uso de la capacidad instalada se ubicó en 70%, 1,3 puntos por encima de enero.
– Desde diciembre pasado las familias orientaron una mayor proporción de su consumo a turismo, ocio y recreación, y la industria lo sintió.
Además, hubo faltantes de insumos y modificaciones de precios que pusieron en pausa algunos pedidos de producción previstos. Las empresas exportadoras también sufrieron el impacto de la menor demanda internacional de algunos países.
– El 66,6% de las PyMEs consultadas evaluó la situación actual de su empresa como buena o muy buena, 4,2 puntos por encima de enero.
– Se redujo 3,7 puntos a 58,6% la cantidad de empresas de la muestra que trabajaron con rentabilidad positiva (de 62,3% en diciembre).
Esa reducción se relaciona con los aumentos en los precios de algunos insumos, especialmente en Alimentos y bebidas y Productos de metal, maquinarias y material de transporte.
Análisis de sectores
– Maderas y muebles. La producción bajó 11,4% anual y el sector trabajó al 69,9% de su capacidad instalada.
La demanda de muebles se vio muy desalentada por los aumentos de precios de la madera y las demoras en las entregas.
– Papel, cartón, edición e impresión. Bajó 11,9% anual y el sector trabajó al 70,5% de su capacidad instalada.
Las empresas consultadas manifestaron problemas para producir por los cortes de energía y por faltantes de insumos como papeles de colores, cartulina y papel químico, donde no se conseguían tamaños.
Algunas empresas trabajaron con lo que pudieron conseguir, incurriendo en mayores desperdicios y mayores costos.
El sector de impresiones, además, viene siendo afectado porque se imprime menos y se trabaja más con ediciones digitales.
– Indumentaria y textil. La producción subió 8,8% anual en febrero y el sector trabajó con el 75,9% de su capacidad instalada.
El inicio de clases y la reapertura de las disciplinas deportivas impulsó la confección y fabricación de prendas. Lo mismo el recambio de ropa de trabajo finalizadas las vacaciones.
Pero el sector también tuvo algunas dificultades para conseguir personal, sintió los cortes de energía y las subas de algunos precios que alejaron público.
Las ciudades turísticas continuaron trabajando muy bien en rubros como mallas, accesorios, remeras, camperas, lo que hizo que el aumento anual sea similar en todo el país.
– Metálicos, maquinarias, equipos y material de transporte. La producción bajó 8,5% anual y el sector trabajó al 68,3% de su capacidad instalada.
La actividad fue afectada por caídas o pausas en exportaciones previstas, dificultades para conseguir materias primas, especialmente las importadas.
En general, las empresas vinculadas a la obra pública y la construcción, tuvieron una mejor performance que el resto.
En cambio, las que tienen fuerte peso en exportaciones fueron las que más sintieron el freno en la producción del mes.
– Alimentos y bebidas. La producción bajó 6,2% anual y el sector trabajó al 69,9% de su capacidad instalada.
Empresas consultadas explicaron que el principal problema del mes fue el incremento en los precios de materias primas, especialmente en aquellas que elaboran alimentos en base a harinas, aceites y lácteos.
En el caso de bebidas una de las trabas que manifestaron las empresas de la muestra fue conseguir envases de vidrio, un problema que viene afectando desde hace tiempo y se agravó en las últimas semanas.
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Fuente e imágenes: CAME.