Genoud Foresto Industrial S.A. y un presente volcado al mercado interno

(Buenos Aires, 30 de septiembre de 2016). D&F Muebles se entrevistó con Héctor Genoud, presidente de Genoud Foresto Industrial S.A.
“Se está entregando hoy a 15 o 20 días; estuvimos cerca de 90 días a 120 días de entrega en algún momento. Era un lío importante para el cliente que no tenía stock. Hoy estamos trabajando mucho más cómodos, seguimos fabricando y luego se vende”, dijo el entrevistado en su stand de FIMAR Buenos Aires.

“Este año no estuvimos en FIMAR Córdoba. Decidimos estar en FIMAR Buenos Aires porque nos parece un poco mejor la puesta. Estamos más cerca (NdR: Genoud tiene sus instalaciones en Pergamino, provincia de Buenos Aires). No quisimos estar en las dos ferias porque con una vez por año nos parece suficiente y acostumbramos a presentar productos nuevos en los eventos. Entonces, hasta que el producto se conoce, se ve su reposición y si funciona a no, hay que esperar. Queremos que nuestros clientes vengan a ver lo nuevo que hacemos. A muchos les resulta más fácil venir a Buenos Aires porque los vuelos son directos, por ejemplo desde el sur. Muchos nos dijeron que la forma de llegar es más cómoda”, dijo el entrevistado al comienzo de la conversación.

– Justamente le iba a preguntar por su opinión sobre FIMAR Buenos Aires.

– Mucha gente nos dijo que es mucho más cómodo, que vienen por otras cosas, como visitas a familiares. También aprovechan y visitan la feria CAFIRA. Por otro lado, estuve hablando con al gente de Presentes y los expositores me decían: “Ustedes vinieron y tienen stands más lindos que nosotros”. A todos les gustaba la idea de organizarse conjuntamente con FIMAR, que de alguna manera está completando a Presentes: regalería, más decoración y muebles. Que son muebles de fabricantes.

– ¿Qué está presentando Genoud Foresto Industrial S.A. en esta edición?

– Hicimos varias reformas de muebles, sillas nuevas, aparatos para televisor, mesas, escritorios. Hemos hecho cinco o seis cambios en nuestros muebles.

– ¿Cómo está la actualidad de la fábrica, sea productiva o de otra índole, y cómo está para ustedes la coyuntura económica?

– Se está vendiendo. Nosotros no dejamos de fabricar. Se está entregando hoy a 15 o 20 días; estuvimos cerca de 90 días a 120 días de entrega en algún momento. Era un lío importante para el cliente que no tenía stock. Hoy estamos trabajando mucho más cómodos, seguimos fabricando y luego se vende. Nos ocupamos de la venta. Cuando hay que apurarla, la apuramos. Y bueno, tenemos muchos clientes y siempre funciona esta forma.

– De alguna forma, usted me está diciendo que bajaron los pedidos pero eso no los complica. Incluso al revés, ¿hasta los beneficia un poco?

– Claro. Un poco los beneficia a los clientes. Para la empresa si tiene muchos pedidos, es mejor. Pero al cliente lo perjudica porque no es fácil vender poniendo como fecha de entrega 90 días. Hoy es mucho más fácil, más cómodo, nadie se pierde ventas. Las cosas no están del todo bien. Algunas zonas están mejor, otras peor y lo van cambiando. Acá se ve mucho entusiasmo, la gente está comprando. Están convencidos y todo apunta a que esto va a seguir, diríamos, en una meseta más baja de la que había antes, pero yo creo que hay que acostumbrarse a un poco menos de lo que teníamos antes.

– Usted me decía que algunas zonas andan mejor y otras peor. ¿Cuáles son los nichos que tienen mejor rendimiento?

– No sé, pero por ahí hay cambios de acuerdo al mes. No puedo decir qué nicho funciona y cuál no. A veces sale un viajante y todo va mal, y viene otro y dice que vendieron bien. Y después se da al revés. Hay lugares, como el sur, en los que la gente se queja. Pero siguen comprando. En Chubut y en Santa Cruz hay lío porque les falta plata, hay muchos empleados públicos.

– ¿Cómo está la actualidad de la fábrica? ¿Qué cantidad de personas está trabajando y cuántas líneas de fabricación tienen en estos momentos? ¿Estratégicamente piensan mantener esta situación o piensan hacer algún cambio a futuro?

– Hay 120 personas en la empresa. Últimamente se trabaja de manera normal, como antes. Hasta el año pasado por ahí se trabajaba alguna horita más para agilizar fechas de entrega. Por ahí se trabajaba algún sábado. Se hacían esfuerzos para que haya la mayor cantidad de gente posible trabajando. Ahora no hay problemas; todos trabajan. Las partidas se siguen haciendo igual que antes. Cuando no se vende tenemos espalda como para hacer stock. Pero nosotros no podemos fabricar de a partidas chicas porque tenemos maquinaria para hacer partidas grandes, siempre.

– ¿La maquinaria qué antigüedad tiene y cuáles son los tipos de madera que trabajan?

– Usamos madera de paraíso y algo de MDF enchapado. Tenemos secadero propio para secar la madera. Y en cuanto a equipamiento últimamente se han comprado maquinarias de control numérico con buena capacidad de producción. En ese sentido siempre tratamos de estar al tope de lo que se puede.

– ¿Cómo está la actualidad de los costos? Sobre todo de diciembre a la actualidad, donde hubo algunos cambios. ¿Cómo impacta eso en la empresa?

– La madera no aumentó. El MDF, tampoco. Si han aumentado, lo han hecho muy poquito y no se notó. Hay cosas que han bajado, porque teníamos un dólar de $16 y ahora tenemos un dólar de $15. Nosotros no hemos subido los precios de diciembre hasta ahora. Al contrario, algunas cosas bajaron. O sea, para nosotros hay una estabilidad. No lo vemos como la inflación que realmente está pasando, que es la inflación del consumo, la de los impuestos. A la empresa no le hace tanto que aumente un poco la luz o que aumente el gas. El gasto mayor está en otras cosas, como en la mano de obra. La mano de obra ha aumentado pero se ha compensado con algunas cosas que han bajado. Tenemos estabilidad de diciembre hasta agosto. Para nosotros tener ocho o nueve meses de estabilidad es impresionante, muy bueno.

– Esto que usted me dice no sé si lo compartirán sus colegas. Es la primera persona que plantea que no tuvieron grandes aumentos en la materia prima y que esa estabilidad lo ha beneficiado. ¿Usted percibe lo mismo o hay otros colegas que están en la misma situación en la que está usted?

– No conozco, pero la madera no aumentó para nosotros. Nuestros proveedores no aumentaron, entonces yo no aumenté. De MDF son empresas grandes, y si aumentaron, aumentaron 2 por ciento, 3 por ciento. Han bajados los precios de algunos herrajes. Y no es tan importante la suba de otros productitos. La mano de obra sí es importante para nosotros, pero como sabemos que necesitamos vender podemos soportar no aumentar ese pequeño porcentaje. Esperemos a ver qué pasa después de agosto y seguramente en septiembre tendremos algún toquecito, pero muy chico.

– Recuérdeme las líneas que produce Genoud Foresto Industrial.

– Es una línea llamada Contemporánea, integrada por muebles más rectos muy tradicionales, con mesas, sillas, aparadores. También ahora hicimos una línea tipo vintage, que sacamos el año pasado y ahora le hicimos algunas reformas. Incluye mesas, sillas, estantería, aparadores, escritorios. Ha gustado muchísimo, tiene colorido. La gente la lleva y se vende. Tiene buena reposición.

– En algún momento la empresa exportaba. ¿La empresa exporta en la actualidad?

– Se exportó durante mucho tiempo en su momento, a Nueva York por ejemplo. Después buscamos otros mercados de América del Sur y llegamos a muchos países de América del Sur, también de América Central: República Dominicana, Panamá. En vez de ir a hacer empresas, fuimos a vender muebles y vendimos. Y vendimos. Pero no fueron operaciones muy importantes.

– ¿Y en la actualidad?

– En la actualidad, no. No, porque en estas operaciones que venían de arrastre el precio se nos fue muy alto en dólares. Hoy está mejorando un poco, pero tenemos mucho mercado interno y no nos interesa tanto la exportación. No lo dejamos de lado pero no nos interesa tanto.

– Entre sus clientes muebleros, ¿cuáles son los temas que más se escuchan respecto de lo que pide la gente o lo que marca la actualidad? Si hay mayor exigencia de calidad, si la gente mira más los precios y pide líneas más económicas, por ejemplo.

– Lo de las líneas más económicas yo creo que es un error. Cuando la gente no compra, no compra. Lo que se escucha es que en vez de entrar 10 personas, entran tres personas al negocio. Entonces son menos para poder venderles. Si antes de 10 les vendían a cinco, hoy de tres le venden a uno. La venta ha bajado un poco.

– ¿Quisiera hacer algún comentario adicional? Ya me dijo que la feria le gustó y que volvería.

– La feria es buena. Las principales empresas están. Creo que después la gente de FIMAR tendrá que evaluar la respuestas a la encuesta que nos dejan a los expositores para saber nuestra opinión. Y veremos si la opinión mía se acerca más a la general, o si por ahí estoy confundido. Pero yo creo que a todo el mundo le gustó y le parece interesante venir a Buenos Aires, un lugar donde como se dice: “Dios está en todos lados pero atiende en Buenos Aires”. Y a nosotros nos queda muy cómodo porque estamos cerca. Y especialmente a la gente que viene de visita. A veces muchos vienen por los rubros bazar y decoración, y se dan una vuelta por el sector muebles. Está también la otra feria de regalería y entonces les resulta más cómodo porque en dos o tres días hacen todo su trabajo.
– Ustedes estando en Buenos Aires incluso pueden captar cierto público de Presentes.

– No lo sé. Siempre hay clientes nuevos que se van haciendo en las ferias. Y no vino tanta gente de Buenos Aires como uno se hubiese imaginado. La mayoría de los visitantes que vino son del interior.

Una empresa de más de cinco décadas

“Tecnología, mucha experiencia y buena madera” es el título de al presentación que la empresa hace de sí misma en su página web.

Y afirma a continuación: ”Tenemos más de 50 años de experiencia en la fabricación de muebles de madera y contamos con una de las plantas industriales más tecnificadas de Argentina. Durante estos años hemos logrado desarrollar y ajustar el proceso producción que nos permite contar con un importante stock y responder satisfactoriamente a los pedidos de nuestros clientes.

“Este proceso integra etapas de diseño, desarrollo, producción y control de calidad para lograr un mueble final de óptimas condiciones.

“Desde su llegada la madera tiene un trato especial, pasando por un horno de secado, donde permanece hasta su punto exacto de madurez. Luego empieza su recorrido por el taller de trabajo, en una tarea dividida por tipo de proceso, planificada en el área de Diseño y Producción.

“En la planta de 20.000 metros cuadrados de superficie, la utilización de maquinarias de última generación es el paso previo al delicado trabajo de personal especializado. La mano del verdadero carpintero le pone un sello 0de calidad y garantía a cada uno de nuestros muebles.

“Lustres, tapizados y anexos ponen el toque final antes de ser embalados y dispuestos en amplios depósitos especialmente climatizados, listos para su despacho y comercialización”.

Una app incluye a Genoud en el mundo en el que todo pasa por el teléfono móvil

AppGenoud es promovida por la empresa como “una herramienta para descubrir el potencial de cada ambiente”. Para que el cliente esté seguro a la hora de realizar su compra, la empresa desarrolló una App que permite visualizar, en tiempo real, cualquiera de sus muebles funcionando en un ambiente. Se pueden intercambiar los colores de las maderas y los tapizados para que se adapten a diferentes gustos, obteniendo más opciones que en nuestro catálogo. Desde el teléfono celular o desde la tablet el cliente puede descargar la aplicación desde GooglePlay o App Store

Fotos: D&F Muebles y gentileza Genoud Foresto Industrial S.A.

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