Desarrollo Forestal dialogó con Pablo Hernández, encargado forestal de Ceibo Bravo S.A., empresa forestal ubicada en Corrientes. “Los plazos de pago se estiraron mucho porque no hay tracción de la demanda. La exportación también se frenó”, dijo Hernández. La empresa acaba de instalar una cámara infrarroja para detección de incendios rurales ubicada en el ingreso al Portal San Antonio, en el correntino partido de San Miguel. Actualidad forestal en la provincia.
– ¿Cómo se dio la posibilidad de incorporar equipamiento para prevención de incendio en Corrientes?
– Varios de los aportantes conformamos el Consorcio de Manejo del Fuego de la zona Centro en Corrientes. Abarca toda la ruta 118, desde Loreto hasta Saladas y un poquito más. Hemos analizado y la mejor inversión son las cámaras, que son automáticas y trabajan las 24 horas los siete días de la semana. Nos juntamos entre varios e instalamos al primera. Si bien no es por medio del Consorcio, está impulsada por integrantes del Consorcio. Y logramos que otros vecinos hicieran un aporte. Además, tuvimos la suerte de que Dirección de Recursos Forestales de Corrientes nos haya apoyado y pudimos hacerlo al bajar los costos. Había una antena preexistente en Parques y el Ministerio de Turismo nos habilitó a que la instalemos ahí. Es una iniciativa privada con apoyo estatal, aunque no del todo, porque los municipios no nos pusieron trabas pero tampoco nos dieron apoyo.
– ¿Cómo funcionan técnicamente las cámaras?
– Son cámaras infrarrojas. Tienen un alcance de entre 25 kilómetros y 30 kilómetros, y van a triangular con una cámaras que tiene Forestal Argentina en la zona. Y nosotros la vamos a entregar para su manejo técnico al Consorcio Forestal de Manejo del Fuego Corrientes Centro, pero las va a monitorear constantemente la gente de Forestal Argentina. Ellos tienen un centro de monitoreo permanente y la van a sumar a sus cámaras. Tenemos el alerta temprano y otras informaciones gracias a ellos.
– ¿Se puede saber el monto de la inversión?
– Va a rondar los $8 millones, casi US$ 6.500. Pero como ya había una antena y la conexión a Internet también, eso hizo que bajaran los costos. Si no, hubiera sido una inversión de $40 millones. Hoy se necesita Internet para que las cámaras estén transmitiendo las 24 horas. Son cámaras de 360 grados, con infrarrojo y son de muy bajo mantenimiento.
– ¿En el Consorcio tienen equipamiento para combatir el fuego con rapidez?
– No, en el Consorcio todos los integrantes tenemos declarado todo nuestra gama de herramientas para prevención del fuego. El Consorcio hace una coordinación y una dirección técnica de prevención y del manejo en caso de incendio. Cada consorcista está comprometido a ayudar a los demás.
– Pero tienen que llamar a las brigadas que combaten el fuego.
– Sí, pero eso es por ley. Nosotros todavía no actuamos nunca con las brigadas, porque son nuevas, pero sí con los Bomberos y con Policía.
– La última respecto de este tema. ¿Cómo está preparada la provincia para la próxima temporada de incendio?
– Sí, estamos bien en cuanto a humedad en suelo. Lo único es que va a haber mucho pasto cuando llegue el verano, pero climatológicamente este año fue muy bueno, con lluvias por sobre la media. La gente está más concientizada. Necesitamos que la provincia sea más estricta en el cumplimiento de la ley y que se sancione a quien corresponda. Se precisa más interacción entre lo público y lo privado.

Situación actual
– ¿Cuál es la actualidad hoy de un productor forestal en Corrientes?
– El productor primario, que se dedica solamente a forestar, está complicado. Se venía con una idea de que esto estaba mejorando pero se trabó mucho, porque la demanda de rollos de madera está bastante parada. Los precios volvieron a caer, son bajos. Los plazos de pago se estiraron mucho porque no hay tracción de la demanda. La exportación también se frenó. Se nota mucho hoy que los pequeños productores no están trabajando porque los costos de inversión y de mantenimiento se duplicaron en moneda constante.
– ¿No se está replantando?
– En algunos casos no se está replantando. Y las zonas afectadas por el fuego en 2022, en la mayoría de los casos, quedaron abandonadas. Hoy se están pagando las consecuencias del fuego porque volver a forestar un campo por el que pasó el fuego es muchísimo más difícil. Y no crece la tasa de forestación, a lo sumo se mantiene. No hay mucho ánimo forestador entre las pequeñas empresas.
– La situación económica conjuga recesión sin obra pública, con bajos precios internacionales, sumado a un dólar que tuvo retoques pero se percibe atrasado. ¿O hay algún dato que se em esté escapando?
– Los precios internacionales no son malos, están dentro de la media. El problema es que ahora quedó al descubierto que nosotros tenemos en Argentina precios muy caros en dólares. La logística en Argentina es muy cara y muy problemática. El puerto de Ituzaingó es una obra maravillosa que hizo la provincia, pero no está activo. En el sector las expectativas son buenas, pero hay que llegar al largo plazo.
– ¿Cómo está la situación de las rutas y de los caminos vecinales en la zona de San Miguel?
– Las rutas están bastante deterioradas, no hay mantenimiento. En la zona nuestra son casi todas rutas nacionales, la 118 y la 12. Y hay caminos vecinales que están buenos porque la provincia trabajó, pero hay otras zonas en las que hay problemas. Y hay muchos problemas dentro de los campos. Porque el mismo hecho de que el productor no tenga rentabilidad hace que sea costoso arreglar los caminos.
– ¿Ceibo Bravo S.A. tuvo que alterar su ritmo de forestación o lo ha podido mantener?
– Nosotros redireccionamos nuestras inversiones. El fuego marcó un antes y un después. Tratamos de seguir con el ritmo de implantación a costa de todo lo demás. O sea, dejamos de hacer obras de infraestructura: dejamos de arreglar los caminos, alambrados, dejamos de cambiar maquinarias. Se han reducido los trabajos silvícolas.
– ¿La madera de calidad, podada, tiene mercado?
– El mercado no paga la madera de calidad en nuestra zona, la cuenca de Santa Rosa. Hoy no se paga la madera de calidad. La ventaja es que se puede llegar a vender antes. Hoy lo que cuenta es el precio.
– Al hablar con colegas o proveedores. ¿Qué es lo que se espera de acá a fin de año?
– De acá a fin de año la gente no espera nada, no espera grandes cambios. Se necesitan un par de cambios muy fuertes. A corto plazo se necesita un cambio en el tema logístico en cuanto a baja de costos y la bendita reforma laboral. Y a mediano plazo se esperan algunas inversiones para procesar la madera argentina, pero eso va a demandar un tiempo más.
– Recordame cuántas hectáreas tienen de patrimonio y cuántas hectáreas están reforestando por año.
– Nosotros tratamos de forestar entre 100 hectáreas y 150 hectáreas por año. Nos quedan para forestar unas 700 hectáreas, y tenemos poco más de 1.000 hectáreas forestadas.
– ¿Y el ritmo de corta anual cuál es?
– Cortamos alrededor de 60 hectáreas por año. Estamos tratando de recuperar fuertemente lo que nos dañó el fuego, que afectó a más del 60 por ciento del patrimonio forestal que teníamos en 2022. Y lo estamos sintiendo todos los años de manera atroz.
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Gentileza Ceibo Bravo S.A.




















