BM TRADA Certification es una de las entidades de certificación más importantes en el Reino Unido con representación en todo el mundo, acumulando más de 30 años de experiencia, según sostuvieron sus representantes en Argentina en este artículo enviado a Desarrollo Forestal.
El nacimiento de BM TRADA Certification se concretó en 1987 a partir de la fusión de TRADA (The Timber Research and Development Association), entidad creada en 1974 para ofrecer auditorías de producto a la industria de la madera, y British Maritime, empresa dedicada a la certificación de sistemas de aseguramiento de la calidad para la construcción de edificios y otras industrias.
La empresa accedió a la acreditación UKAS en 1989; posteriormente fue el primer organismo oficial en acreditarse en las cuatro categorías: Calidad, Medio Ambiente, Producto, y Seguridad y Salud Laboral.
BM TRADA Certification ya emitió certificados para miles de clientes en todo el mundo, en un marco de actividad muy extenso que se continúa ampliando con el único objetivo de satisfacer las necesidades de los clientes.
Por su parte, BM TRADA Certification España tiene sus oficinas centrales en la ciudad peninsular de Santander, contando con presencia en las diferentes áreas geográficas del territorio ibérico.
“La empresa lleva adelante un ambicioso plan de expansión con el objetivo de dar una perfecta cobertura a los clientes en cualquier punto del territorio nacional, aumentando nuestra presencia en instituciones y empresas. BM TRADA Certification Argentina se ocupa del desarrollo y la aplicación de los diferentes estándares existentes en esta materia, estando acreditado para certificar la cadena de custodia de conformidad con las especificaciones exigidas por el FSC y el PEFC”, sostuvieron las fuentes.
La empresa trabaja con el único objetivo de ser, cada vez en mayor medida, un referente a nivel nacional dentro del mundo de la certificación, apoyándose en su posicionamiento internacional y en una red de auditores.
Certificación forestal
La certificación forestal se basa en el hecho de que existe un creciente movimiento encaminado a usar el mercado para promover un modelo social más sostenible. Valiéndose del etiquetado de los productos madereros, se debe asegurar a los consumidores que los productos que adquieren han sido producidos en bosques bien gestionados, ayudando de este modo a desarrollar mercados para estos productos, y asegurando en última instancia incentivos suficientes a los productores que adoptan prácticas sostenibles de gestión forestal.
Objetivo
El objetivo conlleva a la certificación donde la empresa se somete a un proceso de evaluación de forma voluntaria, y que es realizado por tercera parte independiente (entidad certificadora), a través de auditorias de campo y consultas con todos los implicados. Este proceso culmina con un sello o certificado FSC, que finalmente garantiza al consumidor que los productos forestales que lo llevan proceden de montes aprovechados de forma racional, de acuerdo a los estándares internacionales que contemplan aspectos ambientales, sociales y económicos y que definen los niveles mínimos de buena gestión para los bosques de todo el mundo.
La cadena de custodia
La cadena de custodia es el recorrido que realizan los productos forestales, desde el bosque hasta el consumidor. En el proceso de certificación de cadena de custodia se verifican todas las fases de este recorrido (recolección, transporte, transformación y distribución), para garantizar que el producto final procede de un bosque bien gestionado.