D&F Muebles dialogó con Macarena Cravero, directiva de Sinlac, para conocer sobre la actualidad de la empresa. “El crecimiento más notorio de la fábrica fue una inversión que hicimos para producir nuestra propia materia prima. Trajimos una planta completa que produce resina”, dijo Cravero. Eso les permitió controlar la calidad del producto mejorar en costos. La empresa radicada en Colazo, Córdoba, tiene 4.000 metros cuadrados cubiertos y cuenta con 30 empleados.
– La planta industrial ha crecido en los últimos años. ¿Cuáles fueron los sectores en los que se invirtió?
– El crecimiento más notorio de la fábrica fue una inversión que hicimos para producir nuestra propia materia prima. Trajimos una planta completa que produce resina y eso implicó que tuviéramos que cambiar infraestructura y hasta los transformadores de luz. También tuvimos que contratar más personal. Y estuvimos unos diez meses para ponerla en funcionamiento. Hoy la planta produce nuestra propia resina, que es alrededor del 80 por ciento de nuestro producto. Es decir, los poliuretanos para maderas y los catalizadores llevan resina, así que nosotros la producimos y después la utilizamos en los procesos de Sinlac. ¿Qué le permitió esto a la fábrica? Controlar la calidad del producto desde la materia prima hasta el elaborado final y mejorar en costos. También por eso tenemos precios muy competitivos.
– ¿De qué monto fue la inversión?
– Fue de más o menos US$ 500.000.
– ¿Toda la resina que utilizan es de fabricación propia?
– Por el momento producimos nueve tipos de resinas y compramos sólo una, que aún no hemos desarrollado. Para la fábrica de resinas se incorporaron tres personas, pero aún no trabaja al 100 por cien de su capacidad y opera durante tres o cuatro días a la semana. En el futuro se debería producir cinco días a la semana y en doble turno.
– ¿Es por la falta de demanda en el mercado interno? ¿Evaluaron la posibilidad de exportar?
– Sí, la posibilidad de exportar está en estudio. La demanda interna bajó un poco y no salimos a ofrecerla a otros potenciales clientes locales. Podríamos vender solamente la materia prima a otras fábricas de pintura.
– ¿Piensan exportar productos terminados o resina?
– Por ahora estamos haciendo todos los trámites para exportar resina. Y respecto del producto terminado antes no éramos competitivos en costos, pero ahora que producimos resina sí estamos siendo más competitivos con relación al mundo. Estamos en ese proceso de validación. Producimos alrededor de 200.000 kilos de resina por mes.
– ¿Fabricar resina les permitió tener mayor variedad de producción de pinturas?
– Por el momento no hemos desarrollado nuevos productos. Sí nos permitió mejorar mucho la calidad en el producto que ya veníamos haciendo.
– ¿Tienen logística propia? ¿Cómo trabajan en cuanto a atención al cliente?
– Tenemos un camión propio y una Traffic, y llegamos a Córdoba y Santa Fe con toda nuestra logística propia. Llegamos al resto del país con transportes tercerizados, con los cuales tenemos convenios para bajar las tarifas. Tenemos clientes en Misiones, Chaco, Buenos Aires, La Pampa y llegamos a todos.
– ¿Venden directamente a fábricas o tienen distribuidores?
– Tenemos redes de distribuidores en los principales puntos madereros del país. Y en otras zonas en las que no hay distribuidores atendemos a los clientes directamente de fábrica.
Actualidad del mercado
– ¿Cómo ves el mercado hoy? ¿Cómo les fue en FITECMA? Hubo movimiento de visitantes, ¿eso se trasladó en pedidos o en ventas?
– En junio y en julio tuvimos un repunte en las ventas, que creemos que fue como consecuencia de la feria. Hubo muchas consultas, mucha gente interesada. Los otros distribuidores que participaron de FITECMA también se llevaron un montón de contactos y fueron visitados por potenciales clientes. A nosotros nos sirvió mucho la feria. También es verdad que hacía tres años que no se realizaba y uno no ve seguido a algunos clientes, entonces está bueno reencontrarse con personas que ya confían en nosotros. Estuvo bueno. Sí es verdad que bajó el consumo, pero FITECMA fue una gran oportunidad para las ventas.
– ¿En qué porcentaje bajó el consumo? ¿Cómo ven ustedes al mercado, al ser la base del acabado del mueble?
– Hay altibajos, pero la caída del consumo es de entre el 15 por ciento y el 20 por ciento. Pero en julio repuntó, tuvimos buena venta. Mes tras mes los números son distintos.
– Hemos hablado con fabricantes de muebles y algunos están trabajando muy bien y otros muy mal.
– A nosotros nos pasa que hay clientes que comprar mucho y clientes que compran casi nada. Al consultarlos, muchos te dicen que no venden, pero otros compran mucho. Es muy cambiante.
– ¿Han podido detectar mayor o menor demanda por zonas geográficas del país?
– No, no por zonas, pero sí creemos que los muebles con más diseño o más innovadores se están vendiendo mejor que los muebles tradicionales de rotación. Pero no lo tenemos muy estudiado. Y el mueble de rotación tiene más competencia con los productos que están entrando de afuera.
– ¿Con la reciente inversión cómo se ha posicionado Sinlac respecto de los productos importados? Mencionaste que han mejorado en calidad.
– Y en precio. Nosotros siempre hemos tenido precios muy competitivos. Es parte de la base y de la filosofía de la fábrica y con la incorporación de la fábrica de resina hemos podido bajar muchos precios. Respecto de los productos importados, a nosotros no nos repercute tanto el ingreso de productos de afuera porque seguimos siendo competitivos. Lo que sí ha sucedido es que antes no podíamos pensar en exportar porque no éramos competitivos y ahora sí, por eso estamos tramitando los permisos para poder exportar.
– Supongo que esta inversión también les da la posibilidad de brindar un mejor servicio a los clientes, con mejor manejo de stock para una rápida satisfacción de pedidos.
– Sí, sí, eso sí. Tenemos stock de los productos que más piden nuestros clientes y, si no, tenemos la posibilidad de dar una rápida respuesta. Eso es lo bueno de poder tener la fábrica: si entra un pedido que es urgente lo podemos poner inmediatamente en producción. Se resuelve.
– Si la demanda se recupera, ¿qué capacidad de respuesta tiene la fábrica? ¿Pueden captar una eventual mayor demanda de producto o van a destinar un porcentaje al mercado externo?
– La fábrica está preparada para producir más si es que aumentara la demanda. Nosotros hemos llegado a producir 2,5 millones de litros anuales, no habría problemas para abastecer un aumento de demanda.
– ¿Están lanzando nuevos productos?
– No, no vamos a lanzar nuevos productos, pero sí estamos haciendo muchos desarrollos personalizados. Eso sí nos pasa con muchos clientes. Vienen a fábrica, si es necesario los visitamos y creamos productos para ellos según sus necesidades, según el clima de la zona donde están instalados. Nos pasó con un cliente de Chaco y contamos con personal técnico para resolver ese tipo de situaciones. Todas las fábricas quieren incorporar mucho diseño, entonces les preparamos colores a medida, personalizados. Ése es uno de los fuertes de la fábrica.
– ¿Dan capacitaciones en las visitas a planta?
– Sí, tenemos las dos opciones. Puede ir nuestro técnico a la fábrica del cliente, o puede venir a nuestra fábrica el cliente con sus operarios. En el último tiempo se dieron casos para las dos opciones. Yo creo que lo que sucede al momento de la aplicación es lo que genera inconvenientes a la mayoría de nuestros clientes. Tratamos de poder capacitarlos a todos.
– Respecto del nicho de nuevos productos o de productos a medida, ¿son lacas novedosas?
– Sí, en muchos casos son tintas y poliuretanos nuevos. De todo, en realidad. Con colores nuevos. Ahora están de moda los colores más mate, entonces son terminaciones ultra mates. No se usa tanto el brilloso como antes. Pero depende del cliente y depende de la zona.
– ¿Piden algún color en especial?
– No, mucho natural, el verde y el azul también están de moda, pero no hay uno que se destaque mucho por sobre el resto. Se usa también mucho el color muy oscuro, tipo nogal, negro, azul oscuro, y el claro o muy claro, como el natural.
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